A GOLPE DE VERSOS
Alonso Velásquez Claro (Nano)

GRACIAS AMOR

Gracias te doy amor,
por derramar tu lluvia
en mi pobreza.
Tu rocío de granos diluídos
sobre mi palma abierta,
hasta llenar el cuenco de mis manos...
Gracias por tus instantes,
por tus minutos desgranados,
por tu granero lleno
en mi estación de siega.
Amor: fundes tu tiempo
en mi miseria.
Gracias te doy por la cosecha:
horas enteras hacinadas
en el aprisco de mi tristeza.
Fresca hierba, dulce grano
por mi tierra estéril
se tornará en almácigo.
¡Gracias, amor,
porque tu sol madurará mi canto..!

Bucaramanga, Junio 6 de 1997

ROMERO

En tus costas amarré mis sueños
luego de huir de todas mis miserias.
Soy un romero que descansó sus pasos
al final del sendero de tu amor.
Acércate ami pecho y escucha
el desbordado caudal de mis pasiones.
Escucha como canta un ruiseñor
en la rama más alta del mundo...
Toma mi mano y condúceme gozosa
por los caminos límpidos del dia,
para ver como juegan con las rosas
los pájaros en loca algarabía.
Y cuando el sueño me envuelva,
ahuécame tu brazo enamorado
y que tu mano repose cariñosa
sobre el vago confín de mi esperanza,
hasta sentir que le has dado a mi tristeza,
el brebaje más dulce: ¡Tu alegría!

Piedecuesta, Junio 24 de 1997

HOMENAJE III

Al benemérito Col. «Fray José María Arévalo»,
en el 25 aniversario de su fundación...
El viento de tus libros floreció en mis pupilas;
entonces te nombraba con vocablos de espuma.
Cuando añoro tus aulas parece que la vida
me hablara en un idioma de universales músicas.
Mi única heredad -la que amo y defiendo-,
es la de haber nacido de tu entraña nutricia.
Tú le diste a mi sangre una avidez de vuelo
y ungiste mi alta frente con tus óleos de vida.
En mi dura palabra de metales candentes,
siento crecer tu nombre de vino y de centeno.
Retornan a mi alma los días adolescentes,
y me siento en tus patios el niño más pequeño.
En tí late la sangre de mis años pasados;
cada recodo tuyo suspira en mi memoria.
Mi corazón palpita por tus hondas arterias,
y dora mis canciones el laurel de tu gloria.
Acuna mis silencios entre tus hondonadas
y acoge mis fatigas con tus tibios relentes.
Quiero volver a tí mis plantas laceradas
y dormir en tus suaves terciopelos agrestes.
Yo sé del desamor, del olvido y la angustia.
He vivido el cilicio de todo lo inseguro.
He amasado mil panes con levadura mustia,
y ahora sólo quiero que me dejes un muro,
para poder mirar mis soledades últimas...!

Bucaramanga, Julio 22/97 NANO

ACRÓSTICO I

A ñorada princesa que me inspiras los versos,
D esde aquí te recuerdo entre llanto y nostalgia;
R ememoro la savia que me inspiran tus besos
I mpregnados de cielo, de pasión y esperanza.
A quí estoy esculpiendo tu amor en mi silencio,
N egándome la dicha de encontrar en tu cuerpo
A quello que yo busco en el jardín de tu alma...!

Bucaramanga, Febrero 23 de 1998

ALGÚN DÍA ENTENDERÁS

En la espiga que revienta al sol,
en la sonora fuente que frescamente
te acaricie las manos,
en la brisa que te enrede los cabellos,
en el vino que acaricien tus labios,
en la mariposa multicolor
que se pose en una rosa
y te invite a la contemplación.
En la magnitud de Dios
y sus prodigios,
yo sé que entenderás
la grandeza de mi amor...!

Girón, Marzo 2 de 1998