ME
DUELEN LOS RECUERDOS EN EL ALMA Me
duelen los recuerdos en el alma pues son muchas las cosas que se han ido: La
querida inocencia de mis hijos y la fresca emoción de mis palabras.
Me
duelen las querencias que se apagan como un pálido manto de rocío; me
duelen los azares del destino jugando al ajedrez con mi nostalgia.
Me
duelen en el fondo las palabras con las que pude herir a mis amigos; me
duelen los poemas sin sentido que infames delataron mi ignorancia.
Me
duelen los recuerdos en el alma de los maestros que en mi vida fueron faros
de luz que firmes condujeron mis pasos por la niebla de mi infancia.
Me
duelen los recuerdos en el alma de mi pueblo dormido entre sus cerros con
sus calles preñadas de silencio y sus gentes rumiando la esperanza
Me
duelen los recuerdos en el alma de los viejos amores que pusieron una nota
de luz a mis desvelos y un embrujo fugaz a mi esperanza.
Me
duelen los recuerdos en el alma de las mujeres que a mi paso fueron crisol
en el que castas se fundieron mis horas de dulzor y las amargas.
Me
duelen los recuerdos en el alma de la vieja casona del colegio, donde en
tiempos de amor y de sosiego se forjó la nobleza de mi raza.
Me
duelen los recuerdos en el alma de mi casita y todos mis vecinos: Lola,
Virgilio, Roque y Ciro, todos cercanos a la "vieja palma"
Me
duelen los recuerdos en el alma de esas lágrimas tristes de mi madre, cuando
en la languidez de aquella tarde le anuncié con temor, que me marchaba
Me
duelen los recuerdos en el alma del ayer que clavado a mis espaldas me recuerda
con mística constancia que el presente que vivo ya se acaba.
Me
duelen los recuerdos en el alma de lo que pude ser y nunca quise, de lo
que quise ser y que deshice por falta de actitud y de templanza.
Me
duelen los recuerdos en el alma del campo que corrí, cual cervatillo, con
la ilusión y el ímpetu del niño que ignora del dolor sus
alas anchas.
Me
duelen los recuerdos en el alma del rito celestial allá en el templo, donde
mi madre con su paso lento, asido de la mano me llevaba
Me
duelen en fin, tantos recuerdos, que no alcanzo a nombrar en mi añoranza pero
que siguen prendidos a mi pecho y alumbran mi camino en la distancia
!!! Girón,
marzo 21 de 2012 JESÚS
ALONSO VELÁSQUEZ CLARO ("nano") |