AUTOCONOCIMIENTO -12

ALFONSO LOBO AMAYA
Premio Nacional de Literatura Infantil

FELICIDAD E INFELICIDAD.

El Autoconocimiento lleva a conocernos a nosotros mismos, tal como somos, y no como nos gustaría ser ; y a los demás como realmente son y no como aparentan ser; es decir, ver su verdadera personalidad. El Autoconocimiento lleva a conocer el modo de funcionar de la mente, dando paz interior y armonía espiritual.

¿Por qué no somos felices? No somos felices por culpa del sufrimiento mental, creado para nosotros mismos, por la mente racional, al aceptar como verdaderas, creencias falsas, conceptos equivocados, ideas erróneas, condicionamientos de todo tipo: religiosos, culturales, filosóficos, sociales y psicológicos. Es decir, somos infelices porque aceptamos como verdaderos todos los pensamientos que pasan por nuestra cabeza.

Por el temor a perder lo que tenemos, por la angustia de no alcanzar lo que deseamos y por estar rumiando, a toda hora, lo que hemos perdido o porque no pudimos llegar a ser lo que tanto anhelamos ser. Si no nos aceptamos como somos …¿cómo pretendemos ser felices?

No somos felices por las comparaciones absurdas con los que están mejor que nosotros, con el que tiene mucho o con el que no tiene nada. Comparándonos con el que está peor que nosotros para buscar alivio a nuestras desgracias. ”Mal de muchos, consuelo de tontos”. Por comparar tiempos mejores, de ayeres felices, con la incertidumbre de un futuro incierto y negativo. Por el enorme peso psicológico de las cargas de odio, resentimiento y envidia que tenemos contra otros; por no ser capaces de perdonar el daño que nos hacen los demás. Amas a Dios en el perdón del daño que te hacen los demás. (Jesús.)

No somos felices por la acentuada insolidaridad, insensible intolerancia y la aguda indiferencia al sufrimiento de los demás, ya que sólo nos interesa la vida del otro cuando afecta la nuestra. ¡Me muevo por mis intereses! Y por la utopía de querer cambiar a los demás a nuestro parecer o querer cambiarnos a nosotros mismos. ¿Cambiar el ADN del otro o el de uno mismo? Por pretender cambiar la vida como es en el hoy, en el presente real, por la ilusoria idea futurista de “cómo debería ser”. Y porque nunca estamos contentos con lo que tenemos, pues siempre queriendo tener más y más. Y no se trata de conformismo, sino de codicia.

Entonces, si queremos ser felices: ¡Disfrutemos lo que tenemos!.. ¡Disfrutemos lo que la vida nos da en el día a día sin apegarnos a nada!.. ¡Aceptémonos cómo como somos sin compararnos con los demás! y ¡Aceptemos a los demás como son sin pretender cambiarlos!

¡Ayudar siempre dañar nunca! ¡Servir a todos sin esperar nada a cambio! ¿No es este en esencia el mensaje de Jesús?

=======================

Alfonso Lobo Amaya
Escritor - Matemático.
lobitoamaya@hotmail.com