En la parroquia de La Playa de Belén, a la edad de setenta y cuatro años, falleció hoy el presbítero Ángel Cortés Celedón. Sus restos mortales recibieron cristiana sepultura el día 4, en medio de la consternación de todos los habitantes. Había nacido en 1863, en San Juan de Cesar, del actual departamento de la Guajira; era hijo de José María Cortés y Manuela Celedón. Los servicios exequiales fueron presididos por el padre Daniel Sánchez Chica con la asistencia de los sacerdotes, Gregorio Ríos (quien hizo la oración fúnebre), Fernando Sarmiento y Alejandrino Pérez Amaya. El nombre del padre Cortés Celedón está vinculado a importantes sucesos de la historia religiosa y política de La Playa de Belén. La construcción de la casa cural, la reconstrucción del templo y el traslado de la cabecera municipal recibieron su esfuerzo generoso. Desde 1962, año del centenario de la fundación de La Playa de Belén, el parque principal lleva su nombre; el proyecto social, consagrado a la protección del adulto mayor, creado y presidido por el padre Fray Ismael Arévalo Claro, fue identificado como Fundación Padre Ángel Cortés, para perpetuar su memoria.

Tenía cincuenta y seis años cuando llegó a La Playa de Belén, procedente de una parroquia de las riberas del Magdalena, donde su salud había sido deteriorada por las enfermedades tropicales. El 6 de abril de 1919 inició actividades. Por sus gestiones ante el ministro García Benítez, se logró el establecimiento de la oficina telegráfica, que funcionó en unas piezas de la antigua casa cural. El 23 de febrero de 1925 ya existía estafeta de correos.

El padre Ángel Cortés fue el principal gestor del traslado de la cabecera municipal de Aspasica al corregimiento de La Playa de Belén. Dice el sacerdote García Benítez, en sus apuntes históricos, que fue "Iniciador y alma mater de esta empresa… su entusiasmo, su influencia, su dinero siempre estuvieron a la orden. Al lado de este sacerdote son acreedores a la gratitud de los hijos de La Playa, los señores Ramón Ovallos, Emeterio Claro, Agapito Pérez, José Trinidad Durán, Francisco Arévalo, Ismael Arévalo, Alfonso Durán, Santiago Durán, Ángel María Durán, Domingo Pérez, Eladio Claro, Guillermo Arévalo, Pedro Claro, Ramón Claro, Víctor Arévalo, Natividad Claro, José del Carmen Pérez, Hermenegildo y Basilio Ascanio, Ramón Bayona, Bernardino y Francisco Pérez B., Juan Velásquez y Juan M. Luna".

El 27 de junio de 1929, dolido por el apoyo del Concejo de Ocaña a los aspasiqueros, envió una enérgica nota al abogado de las aspiraciones playeras, doctor Manuel José Vargas. La contienda, inspirada por el comportamiento non sancto de los dirigentes de la cabecera municipal, y atizada por intereses partidistas, había tocado las fibras de la condición humana del sacerdote. Aseguraba el padre Cortés, que la decisión no se debía al Concejo sino a "unos políticos intrigantes, antes admiradores de La Playa y hoy sus enemigos por ciertas aberraciones, por el fracaso que sufrieron en las elecciones de febrero y ellos creen que nosotros tuvimos la culpa".

La vehemencia por la causa playera lo condujo a una agresión innecesaria que, seguramente, no fue compartida por muchos, pues Aspasica podía tener dirigentes de dudosa reputación, pero no merecía el calificativo de "villorrio miserable". La carta confirma la calidad de su liderazgo, por la energía de sus requerimientos y por el conocimiento minucioso del expediente. En ella exigió la revisión de los memoriales firmados por lugareños y habitantes de los pueblos vecinos, que apoyaban sus "justísimas peticiones". Manifestó que estaba dispuesto a patrocinar la gestión en todas las instancias, hasta con sus propios recursos económicos, si fuera necesario: "Deseamos saber Doctor, cuánto nos lleva por sus gestiones, lo que tendremos mucho gusto en remitirle enseguida. Como tengo teléfono en mi casa, tendré mucho gusto en oír su palabra cuando se ofrezca comunicarnos algo y también en reconocerle lo que gaste en esta operación".

		Trabajó sin descanso hasta ver culminada su obra. Finalmente, la Ordenanza No. 3, del 20 de marzo de 1930, de la Asamblea Departamental, aprobó el traslado de la cabecera municipal. Con el propósito de rendirle un homenaje en vida, el Concejo ordenó la instalación de una fotografía suya en el salón de sesiones, pero la Alcaldía no pudo reunir el dinero para pagar los honorarios del fotógrafo. Don Francisco Arévalo Claro, quien profesaba especial afecto por el sacerdote, adquirió la fotografía y la llevó a su casa donde todavía la conservan sus descendientes. En el templo de La Playa de Belén se encuentran sus cenizas, cubiertas por una placa de mármol, con su rostro tallado en alto relieve. (Apuntes de la obra, Temas de historia, de Guido Pérez Arévalo, publicada por la Cámara de Comercio de Cúcuta en marzo de 2009. Foto: Archivos Álvaro Claro Claro)
Día Año Memoria 7 2015 Marcha por la Paz
MOTIVOS: 1. El 13 de octubre de 2014, en un ataque criminal, que perturbó la vida apacible de La Playa de Belén, perdieron la vida dos agentes de la policía y fue herido el comandante de la estación. Aproximadamente a las diez de la mañana, engañados por los mismos delincuentes, el comandante y dos patrulleros acudieron al sector de Los Pinos (La Puerta del Sol) con el propósito de controlar un presunto acto de alteración del orden público y allí fueron recibidos con dos artefactos explosivos que determinaron la muerte instantánea de los agentes, Luis Ángel Gómez Montoya, de 35 años, natural de Anorí (Antioquia) y Luis Fernando Olarte Vargas, de 35 años, oriundo de Bolívar (Santander). El comandante de la Estación, intendente Alkilis Duarte Martínez, recibió lesiones de alguna consideración, que fueron atendidas en el hospital de Ocaña. 2. Hostilidades a la Estación de Policía. El pasado 31 de enero, a la 11:30 p.m., fue lanzada una granada de fragmentación y se oyeron algunos disparos en la apacible noche playera. Ver más...

Dice en sus apuntes autobiográficos: "Nací en una finca de veraneo y también, agrícola, denominada "El Hato" o "La Pradera", ubicada a poco más de un kilómetro al norte de la población de La Playa de Belén el 11 de febrero de 1908 y fui bautizado en la respetiva Parroquia por el Presbítero español José Aguado. Fueron mis padres Julio Alfredo Luna Alvarez y María Petrona Manzano Claro, ambos oriundos de Ocaña". Adelantó estudios de primaria en la escuela rural de varones de La Playa de Belén y tres años de Literatura con los padres Jesuitas en el Colegio José Eusebio Caro, de Ocaña. En 1925 fue nombrado director de la Escuela Rural de Varones. En 1933 encabezó la lista victoriosa del Concejo Municipal. Cuando tenía 26 años de edad, fue elegido diputado a la Asamblea Departamental, de Norte de Santander. Al lado de notables dirigentes regionales como, Luis Parra Bolívar, Pedro Antonio Sánchez y Luis Abelino Ramírez, entre otros, cumplió meritoria labor.

En 1934 obtuvo la aprobación de la Ordenanza No. 16, del 10 de abril, que cambió el nombre del municipio de Aspasica por el de La Playa de Belén.

Académico. Historiador, músico y periodista sobresaliente. En su juventud fue condiscípulo y compañero de luchas políticas del doctor Lucio Pabón Núñez, a quien lo unió una cordial amistad.

Fundó "El Terruño", publicación quincenal, cuya dirección compartió con don José Antonio Claro y don Donaldo Durán Castilla, para defender los intereses del Partido Conservador.

Al lado del padre Ángel Cortés, fue uno de los principales abanderados del traslado de la cabecera municipal de Aspasica a La Playa de Belén. El poder otorgado al doctor Manuel José Vargas, el 13 de junio de 1929, para que éste representara los intereses de los playeros, lleva su firma y la de los señores Francisco A. Suárez, Ismael Arévalo y Trinidad Duran.

"Noticias Playeras" publicó, en la edición número 9 de octubre de 1975, su trabajo monográfico sobre La Playa de Belén. La Organización de Integración y Desarrollo le otorgó la condecoración del "Ramillón de Oro" en 1985.

Contrajo matrimonio con Doña Raquel Noguera Pérez y fueron sus hijos, Rafael, Carlos Alberto, Ligia Esther, Mario Eduardo, Alicia Eugenia y José Luis. El 23 de marzo de 1996, rodeado de su familia y del afecto de sus coterráneos, descansó en la paz del Señor, en la ciudad de Ocaña. (Apuntes de la obra, Temas de historia, de Guido Pérez Arévalo, publicada por la Cámara de Comercio de Cúcuta en marzo de 2009. Foto de Noticias Playeras.).

Hojita Parroquial se publicó como "Órgano de La Playa y El Cincho". El presbítero Francisco Angarita fue su fundador y director. Se imprimió en linotipo, en papel periódico, tamaño medio oficio. Tenemos fotocopia de la colección que se conserva en la Biblioteca Nacional.

En nuestra monografía de La Playa de Belén, se reproduce un artículo del padre Angarita, publicado en la revista "Hacaritama" No. 21, de noviembre 30 de de 1936, del cual extractamos lo siguiente:

"En efecto, el día 13 de febrero de aquel año inicié tal obra echando a los cuatro vientos de la publicidad en una edición restringida de 200 ejemplares el primer número de "Hojita Parroquial" en el entonces nuevo caserío de La Playa de Belén, jurisdicción de Aspasica, Provincia de Ocaña, en nuestra sección nortesantandereana, región de la cual había sido designado párroco en el año anterior de 1912. Como naturalmente en el caserío se carecía de taller tipográfico, se editó acá en Ocaña en la "Tipografía Iris".

"He aquí lo que tiene "Hojita Parroquial" como primera publicación de su género en la República... Con las autorizaciones eclesiásticas respectivas, empezó y siguió su curso. "Hojita Parroquial" durante los tres años de mi administración espiritual de la región... Yo espero que mañana, cuando se haga historia general sobre este punto, o cuando tal vez se celebren las bodas de plata de las publicaciones parroquiales, aparezca "Hojita Parroquial" de Belén de La Playa como la primera que vio la luz pública en Colombia, mereciéndole a ella una consagración y a mí el honor de haber iniciado esta labor..."

		En Hojita Parroquial número 11, del 8 de diciembre de 1913, se publicó el Acuerdo No. 3, del 15 de septiembre 1913, del Concejo de Aspasica, por medio del cual se creó el corregimiento de La Playa de Belén. Dice su artículo primero: "Erígese en Corregimiento con el nombre de La Playa de Belén el territorio del caserío de La Playa de este municipio". Este Acuerdo es la partida de bautismo de nuestro caro terruño.También se publicó en la misma Hojita Parroquial el Acta de Instalación del Corregimiento.

En la edición número 3, del 6 de abril de 1913, se publicó, como curiosidad, la reseña histórica de El Cincho (La Vega de San Antonio), encontrada por el presbítero Francisco Angarita en un libro litúrgico de la parroquia de El Cincho.

En esta fecha llegó la obra poética del padre Campo Elías Claro Carrascal, de la Orden de Predicadores, al Departamento de Publicaciones de la Universidad Santo Tomás. La primera edición salió a la luz pública en el mes de julio del mismo año. Nos remitimos a sus palabras de presentación: "¡SAUDADES! ¿Cuál es la razón fundamental para que en la portada de este libro se presente destacado este nombre que para muchos es raro, extraño y peregrino? "SAUDADES! ¿Por qué, de común acuerdo, el abogado y hábil periodista - historiador, Guido Pérez Arévalo y el contador profesional Alvaro Claro Claro, funcionario del Icetex en Cúcuta, resolvieron titular este libro, con mi aceptación, con el nombre exótico de origen portugués, SAUDADES, registrado en el diccionario español con la suavidad musical de su ancestro lusitano y el misterio y secreto encanto, bellamente triste, que entraña su significado y su empleo en el territorio sentimental de la poesía? "La razón es clara y determinante, porque a través de estas páginas líricas y sentimentales, surgen muchas veces los hondos acentos que entraña y representa este dulce vocablo de ascendencia portuguesa: Deseos profundos de poseer el bien ausente; añoranzas y recuerdos de un puro y casto amor, que ni el tiempo voraz y despiadado ha logrado matar en nuestras vidas sentimentales; añoranzas que nos hacen pensar con tristeza en un ser querido ausente; nostalgias y melancolías profundas que inundan nuestro espíritu de hondas tristezas y penas inefables.

"Queridos lectores: Van, pues, estas SAUDADES con todo el corazón de mis 83 años, que no son otoñales, sino primaverales, por la Gracia de Dios y el Amor de la Virgen de Chiquinquirá..."

Fray Campo Elías Claro Carrascal, O.P.
Santafé de Bogotá, febrero 15 de 1997.

Edición: Guido Pérez Arévalo
Fotografías: Alvaro Claro Claro
Impresión: Departamento de Publicaciones, Universidad Santo Tomás. Julio de 1997 - 136 páginas.

Fue fundada para "estrechar los vínculos de solidaridad entre los hijos de La Playa de Belén y trabajar por el desarrollo cultural, económico y social de los asociados". Su primer presidente fue el contador público, Alirio Claro Ojeda, quien murió en trágico accidente de aviación, en plena juventud. Entre las personas de mayor actividad de la organización, deben recordarse los nombres de Tarcisio Claro Peñaranda, Yolima Sánchez de Claro, Juan Hernando García, Doris Claro de García, Luis Humberto Ovallos, Torcoroma Pérez de Ovallos, Jesús Ovallos Sepúlveda, entre muchos otros, relacionados en la obra "La Playa de Belén".

La Asociación fue organizada por las mismas personas, que en su tiempo, participaron en la Colonia Playera, residente en Cúcuta. Una fotografía publicada en 1974 por el periódico de la Colonia Playera residente en Bogotá, muestra a Don Benjamín Claro Ovallos tomando el juramento de rigor a la Junta Directiva, entegrada por los señores Carlos Adolfo Claro Ovallos, Raúl Arévalo Claro, Sigifredo Claro Peñaranda, Jesús Claro Arenas. La Junta de la Colonia fue presidida, posteriormente, por el señor Tarcisio Claro Peñaranda.

Los playeros, residentes en Cúcuta, se reunían regularmente en "Residencias Tarigua", de Don Carlos Adolfo Claro. Desarroban actos sociales y participaban en los festivales de la cebollas con especial entusiasmo. Las colonias de Ocaña, Cúcuta y Bogotá enviaban preciosas candidatas a los reinados del festival.

El 15 de octubre de 1914 recibió su título de abogado. En 1915 contrajo matrimonio con doña Margarita Ramírez, de cuya unión hubo seis hijos: Cecilia, Manuel José, Enrique, Alfredo Elías, Juan y Margarita. El 9 de noviembre de 1936 fue nombrado Ministro de Agricultura y Comercio por el Presidente Alfonso López Pumarejo. También fue Ministro de Comunicaciones.

Uno de sus hijos, Enrique Vargas Ramírez, fue Ministro de Obras Públicas y Embajador de Colombia en Venezuela.

El doctor Vargas Durán representó a los playeros en el conflicto surgido entre Aspasica y La Playa de Belén por el traslado de la cabecera municipal. El triunfo jurídico tuvo como consecuencia la expedición de la Ordenanza número 3 del 20 de marzo de 1930 por medio de la cual se trasladó la sede administrativa del municipio de Aspasica al corregimiento de La Playa de Belén.

Fuente: Obra, Chinácota, encuentros con la historia, de Guido Pérez Arévalo, publicada en diciembre de 2011.