| | | Un
dulce encuentro En
un centro comercial de Cúcuta, al dulce ritmo de dos tentadores helados,
tío y sobrino comparten opiniones sobre las plagas de moda en la frontera:
zika, chikungunya y maduradas; pero no pierden la oportunidad para meterle la
mano a los temas que arrullan la vida del sacerdote. El
pade Ismael Enrique Arévalo Claro, radicado ahora en Villa de Leyva, viene
de la provincia de Ocaña, después de algunos días de descanso
en la Casa Mayor. Ese es su punto de referencia, el lugar de encuentro con sus
sueños, la memoria de su infancia y el lazo que lo une a FUNDAPAC, la fundación
de los abuelos, creada por él. La
Casa Mayor es el antiguo hogar de sus padres, don Francisco Arévalo Claro
y doña Juana de Dios Claro Bayona, en el terruño amado, La Playa
de Belén. Es una agradable casona,
cargada de recuerdos familiares, valioso patrimonio cultural de los descendientes
de Francisco y Juana. Fray
Ismael está empeñado en convertir en realidad un importante proyecto
social que busca la integración y desarrollo de la Fundación para
el Adulto Mayor Angel Cortés FUNDAPAC. Para tal propósito ha convocado
a potenciales benefactores y toca todas las puertas con optimismo y, especialmente,
con la esperanza que surge de Dios. Febrero
1 de 2016. | |