Sus canciones inspiradas en Chinácota, Ocaña y Cúcuta

 

En la mañana del 6 de junio de 1929 nació a 40 kilómetros de Neiva, en la Hacienda El Cedral, el maestro Jorge Villamil Cordovez. Hijo de don Jorge Villamil Ortega y Leonor Cordovez Pizarro. Su temperamento artístico recogió el alma de su pueblo especialmente dotado por la música y empezó a gestar poemas ancestrales que más tarde brotarían de improviso como surtidores de armonía incomparable.

Villamil Cordovez estudió en Neiva en el Colegio de la Presentación.

 
 

Estuvo interno en el Colegio ‘Antonio José Sucre’ de Garzón y culminó su bachillerato en Antonio Nariño de Bogotá, donde perteneció a los coros del colegio.

La etapa decisiva para el compositor fue su estadía en la Javeriana donde estudió medicina. “Fue algo así como si se abrieran las compuertas represadas... me integré a un grupo musical y en ese momento compuse ‘La Zanqui-rrucia’ en honor a Pacha Ramos, quién vendía bizcochos y era de El Tabor. Bailaba muy lindo. Desde entonces, 1951, empecé a componer y con mucho recelo me mantuve en el anonimato”.

Su descubrimiento

Durante su estancia en Neiva por causa de la enfermedad de su padre encontró el trío Los Sinzontes y con ellos montaron ‘La Zanquirrucia’, ‘Adiós al Huila’ y ‘El retorno de José Dolores’. La familia había perdido la hacienda en el año 52, en la violencia.

En una serenata a Luz Marina Zuluaga, en Manizales, interpretó junto al trío estas canciones. Allí estaban presentes Los Tolimenses que averiguaron el nombre del autor y viajaron a Neiva a grabar por primera vez estas producciones y así nació Jorge Villamil, su carrera de compositor.

Se especializó en Ortopedia y Traumatología y su tesis fue presentada en nombre de Colombia al Congreso Panamericano en la ciudad de México. Allí compuso ‘El Barcino’, ‘Acíbar en los labios’, ‘Entre cadenas’, ‘Ocasos’, ‘Rumbos marineros’, ‘Soñar contigo’ y ‘Oropel’.

Ejerció la medicina durante 22 años, abandonándola para dedicarse de lleno a la composición. “Todas las canciones las quiero como a hijos...” pero hay algunas importantes en su vida: ‘Espumas’ lo hizo famoso; ‘Llamarada’ es la más vendida por su aceptación musical; el efecto lo une a ‘Vieja Hacienda del Cedral’ y ‘Al sur’; ‘La Mistela’, la hizo en una mañana; a su esposa Olga Lucía le dedicó ‘Los Remansos’.

Jorge Villamil va recogiendo lo más puro y autóctono de su tierra y al tocar el alma, toca lo más humano de su región. Su canción va tomando proyecciones de patria, de continente y el mundo lo escucha como uno de los representantes más arraigados de América cuyas armonías al mundo con vibraciones terrígenas universales.

(Síntesis biográfica, tomada de diversas publicaciones)

 
 
El maestro Villamil falleció a los 80 años de edad en Bogotá, el 28 de febrero de 2010

 

Neiva, 20 de mayo de 2002

Apreciado amigo Guido:

Antes que nada felicitaciones por su excelente sitio en la red. El motivo de esta nota es el siguiente:

Deseo saber alguna información sobre época y motivación de la canción Tierra Chitarera, escrita por el doctor Jorge Villamil. Él me ha suministrado algunos datos pero todavía tengo unos vacíos sobre personajes allí nombrados, dos presidentes nacidos allí y otros aspectos. Igualmente requiero saber algo relacionado con la canción Las playas (que no tiene nada que ver con el pueblo nortesantandereano del mismo nombre) y que según su autor surgió un día en que fue invitado como jurado al concurso de belleza de Chinácota. Me interesa de ésta su fecha o época de creación.

Estos datos los requiero para complementar información sobre la biografia del doctor Villamil, que debe ir a imprenta antes de 15 días para ser publicada por la Gobernación del Huila a finales de junio.

Le agradezco su colaboración... Mil gracias

Vicente Silva Vargas

Nota: Envié, al señor Vicente Silva, los números telefónicos de los señores Jorge Muñoz (amigo personal del maestro Villamil) y Andrés Bello (compadre del maestro), quienes fueron anfitriones y compartieron con Jorge Villamil durante sus visitas a tierras chitareras. El libro fue publicado. GPA

 

Doña Xiomara Mantilla de Bello, Jorge Villamil Cordovez y doña Esperanza Viuda de Bello, en el bautizo del niño Juan Carlos Bello Mantilla. Villamil fue el padrino. Dic./1979

Cortesía de don Andrés Bello, padre de Juan Carlos.


Las canciones

ALMA CHITARERA (Pasillo)

En un hermoso valle que baña la Iscala
con profusión de flores y clima sin igual
Chinácota se extiende, Chinácota se ve
con sus bellos paisajes de eterna primavera
adornando esta tierra, Norte de Santander.

El Cerro de La Vieja
se yergue imponente
entre sus neblinas, cual bravo centinela
desde allá vigila que no te hagan mal.

En tus suelos guardas carbones
y tus gentes aman la paz
adornan las bellas norteñas
la feria de San Nicolás.

Los indios chitareros
con flechas y lanzas
vengaron la afrenta
la historia nos lo cuenta
que allí con su vida Alfinger pagó.

En tus suelos guardas carbones
y tus gentes aman la paz
se alegra con tu fiesta brava
la feria de San Nicolás.

Y creces armoniosa cerca de la frontera
llevando con orgullo la sangre chitarera
pues diste Presidentes
a Colombia y Venezuela.

LAS PLAYAS (Pasillo)

Mañana yo me iré, no sé si volveré
me voy llevando sentimiento de olvido
llevo en mis manos el marco de tu cara
y tu sonrisa clara que nunca olvidaré.

Porque las almas son juguetes de la vida
como las hojas sacudidas por el viento,
por eso hoy llevo el cruel presentimiento
de duda y tormento de no volverte a ver.

Como las olas de las lejanas playas
que van y vienen besando las arenas
así llegué yo a ti hasta tu alma,
queriendo yo encontrar la paz serena.

Pero las olas se alejan de las playas,
siguiendo el mar, en su agitar, su eterno andar
así también soy yo como esas olas,
que un día se marcharon hacia otras playas.

MEMORIA DE LAS PLAYAS
 

"Con este pasillo sucedió una cosa extraña porque su compositor no se inspiró al pie del mar ni junto a un río, sino en una noche de tragos de Chinácota, Norte de Santander. Además, siendo aparentemente un tema relacionado con el mar, la musa le inspiró un andino pasillo y no un pegajoso tema Caribe.

"Hacia 1978 Villamil fue invitado por primera vez como jurado a la elección de la representante de Norte de Santander al Reinado Nacional de la Belleza que se celebra en Cartagena. Luego de escogida la ganadora, autoridades, organizadores, jurados y periodistas tuvieron una alegre tertulia en los jardine4s del Hotel Islavita en donde se habló de música, belleza y folclor, aunque los asistentes, azuzados por un locutor, le insistieron al maestro para que cantara sus composiciones e hiciera una canción. El compositor respondió amablemente y explicó que una composición podría surgir en el momento menos esperado, aunque a veces se daban circunstancias inesperadas que incentivaban su espíritu musical. Y la casualidad apareció esa noche vestida como una bella universitaria de Pamplona, Norte de Santander, quien llorosa y triste quería desahogarse contándole sus penas a cualquiera. La causa de su llanto era la indecisión afectiva ya que de un día a otro se enamoraba perdidamente de un hombre y luego, sin decirle adiós, se encariñaba de una nueva ilusión. Ella admitía su condición de irresoluta e inconstante y decía que esa inestabilidad siempre le había ocasionado problemas en el amor. De ahí se pegó el autor para comparar el amor fluctuante con la cadencia de las olas marinas. Poco después entregó su letra a Los Comuneros quienes hicieron una excelente versión". (Vicente Silva Vargas, Las huellas de Villamil, pp 355, 356. Roa Impresores, Neiva, Huila. 2002)

 
 
 

MEMORIA DE UNA VISITA A CHINÁCOTA (Alma chitarera)

De los archivos del profesor Jorge Serna Páez, cuando tenía su residencia en Chinácota, obtuvimos la copia de un precioso casete, con la grabación de la ceremonia de condecoración del maestro Villamil en la Casa de la Cultura. Don Jorge Muñoz, conductor del evento cultural leyó la biografía de Jorge Villamil y presentó al trío "Los Motilones" en la interpretación de las canciones "Alma chitarera", "Portón de la Frontera" y otras hermosas canciones del folclor nacional. En el trío participaba el periodista Rafael Norberto capacho.

En nombre de los empleados de la Casa de la Cultura, el folclorista Francisco Javier Peñalosa le dio la bienvenida y le hizo una breve entrevista, de la cual publicamos los siguientes fragmentos:

- ¿Qué siente un compositor al estar en una tierra de tanta cultura como lo es Chinácota?
- Si, es muy agradable. Yo considero que uno compone cuando está motivado... Resulta que si yo no siento la motivación no sale nada. En cambio en Chinácota salió. Yo he venido varias veces a Chinácota; sé de sus valores, su belleza, su simpatía… eso motivó el pasillo "Alma chitarera".

El maestro Villamil agradeció el homenaje con las siguientes palabras:

"Es uno de los momentos lindos para el artista, porque el artista vive del aplauso, vive del estímulo porque, también, la economía de todo el arte nacional, especialmente, es muy precaria pero goza con estas expresiones.

Quiero saludar a todas las autoridades, al alcalde Escalante, encargado, al doctor César Fernández, presidente del Concejo Municipal de Chinácota; a todos los concejales, demás autoridades del Municipio; al Señor Obispo, al padre Maximiliano, yo digo que tiene cara de que va a ser obispo, quién sabe a dónde lo manden; a la madre, a la señora que donó sus terrenos… Casi nunca seguimos los ejemplos de Cristo… Cuando le dijeron bueno… yo quiero seguirlo, Señor. Dijo: Vaya regale todo y me sigue… Usted ya alquiló una nave para entrar al Paraíso, porque Dios la recibe con todo el afecto el día que se vaya. Somos perecederos. Todo lo tenemos prestado.

A los medios de comunicación, los de Cúcuta. Recibí una muestra de "Alma chitarera". Me pareció lindísima porque es un arreglo muy original. Con el tiple interviene el otro ángulo muy adelante, muy bonito, al conjunto que está acompañando... y de manera especialísima a la Lotería de Cúcuta, está su representante, que me atendió muy bien ayer y a Jorgito Muñoz.

Mi presencia aquí, en gran parte, se debe a Jorgito Muñoz, porque yo he venido en tres oportunidades a Chinácota, como jurado para elegir a la Señorita Norte de Santander. Hemos gozado muchísimo, hemos pasado la Feria de San Nicolás y siempre Jorge ha sido la persona abanderada para mostrar a todos los visitantes lo que vale de Chinácota, sus gentes, sus paisajes, su amabilidad y su estructura como población, como un centro vacacional de primera magnitud.

Entonces, muchas gracias Jorgito. A él también le pusieron el Cacique de Oro. Ustedes deben tener en Jorge una persona muy valiosa; la tienen, mejor. De modo que les digo a los medios de comunicación, a todos, a cada uno de ustedes los chitareros que esta canción le va a dar la vuelta al mundo porque va a ser grabada. Aparte de aquí, va a haber una versión de Silva y Villalba y de Los inolvidables. Yo quiero decir por qué llegamos tarde… Jorgito me estaba echando la culpa que era que yo el que no me levantaba… él es el que está enguayabado y tuvieron que levantarlo con garlancha… gracias Jorgito".

Dice don Jorge Muñoz que la intervención se desarrolló en la Semana Santa de 1995. El pasillo fue grabado en el año 2007 y estrenado en la Escuela Mariano Ospina Rodríguez, en el mes de marzo, en una de las famosas serentas chitareras del señor Muñoz, quien distribuyó el CD con la firma de Villamil.

 
CANCIONES A CÚCUTA Y OCAÑA
 

PORTÓN DE LA FRONTERA (Vals)

Muy noble y muy leal,
te llamaron los reyes,
blasones que conservas con orgullo
allá en el Pamplonita.

El cielo claro es, en Cúcuta bonita,
llegando a tu valle se alegra el viajero,
admirando al norte Cerro Tasajero.

Tus soleadas calles con sus arboledas
que adornan de tarde las bellas morenas,
que adornan de tarde las bellas morenas.

Portón de la Frontera, aroma y primavera,
qué bonitos paisajes se miran al pasar.
Allá en Aguascalientes, Ureña y San Cristóbal,
San Antonio o al sur, las tierras de Pamplona,
San Antonio o al sur, las tierras de Pamplona.

En Villa de Rosario, monumento nacional,
aquel que cruce ha de sentir admiración
y el viento hace mecer las palmas reales
que al cimbrar con sus follajes nos dirán adiós, adiós.

Portón de las frontera...
... nos dirán adiós, adiós.

 

 

OCAÑA HEMBRA MORENA.

Bambuco. Letra y Música de Jorge Villamil.

Brisas del Algodonal que van besando las lomas,
y bandadas de palomas, saludando allá en la sierra:
La Virgen de Torcoroma.

Mirando los estoraques que a La Playa de Belén, adornan,
se admiran raros altares, de exóticas catedrales
que en las barrancas se forman.

Ocaña, hembra morena, bella flor del barbatusco;
en la distancia te busco, y en mi corazón te llevo.
El dulzor de las cocotas, con su color encarnado,
Lo tienen las ocañeras en el fuego de sus labios.

Llevas grabada en la historia: Aquella Gran Convención;
donde por el egoísmo, de soldados y caudillos:
La Gran Colombia, finó.

Al cruzar por esos lares, llenos de tiempo y de gloria;
me vienen a la memoria: la figura de los Caro,
su poesía y oratoria.

Ocaña, hembra morena...

Plazuela de San Francisco y calle de Antón García;
Columna de los esclavos, guardando noble pasado;
de grande ¡ay, bizarría!

Adiós Ocaña morena, de tu tierra me despido;
de aquellos buenos amigos, los nortesantandereanos,
adiós a todos les digo.

Ocaña, hembra morena...

(Apuntes del libro inédito, Chinácota, un lugar para soñar, de Guido Pérez Arévalo)

 Bucaramanga, 4 de marzo de 2010.

Leyendo la fascinante anéctoda contada por Alvaro sobre la visita del Dr. Jorge Villamil Cordovez a nuestro terruño, me da la oportunidad de contar que por allá en los años 76-77, mi gran amigo "Tavo Tarazona" trajo de la ciudad de Cúcuta un "cassete" dentro del cual había una canción que nos llamó mucho la atención por la hermosura de su letra y por la nostálgica cadencia de su música, en tiempo de vals. Esa canción se llamaba "Portón de la frontera".

Como de todos es sabido, Tavo y yo éramos unos irredentos admiradores de la música colombiana y todo lo que caía en nuestras manos, se convertía por obra y gracia de las serenatas y las reuniones sociales, en éxito del momento... La anécdota consiste en que nosotros hicimos popular esa canción en nuestro medio, sin haber salido aún al mercado su versión oficial, pues esa grabación que Tavo había traído, parece ser que fué un desliz del compositor que se le ocurrió cantarla en esa ciudad a manera de primicia y especulo yo, que pudo haber ocurrido en alguna de esas reuniones en donde el maestro era muy dado a compartir con la audiencia del momento, sus trabajos próximos a publicar... O sea que cuando la canción salió al mercado, no fue para muchos, novedad alguna...

A mediados del año 2003, tuve la dichosa oportunidad de conocerlo y compartir con él algunas impresiones sobre la música andina colombiana, a través de mi cuñado, el maestro Bernardo Domínguez, en el Instituto de Cultura del Huila. Alonso Velásquez Claro

 
 
 
 

Cúcuta, 3 de marzo de 2010. Yo paso a creer que esta estrofa de la canción, "Ocaña hembra morena", del maestro Villamil, tuvo mucho que ver con su paso por La Playa de Belén:

"Mirando los estoraques
que a La Playa de Belén, adornan,
se admiran raros altares, de exóticas catedrales
que en las barrancas se forman."

Alvaro Claro Claro

 

Cúcuta, 3 de marzo de 2010.

El gran maestro de la música Colombiana estuvo en La Playa de Belén. No sé si haya algún registro del hecho. La fecha tampoco es fácil de precisar. Imagino que en uno de sus viajes a Chinácota aprovechó para conocer la región de Ocaña.

Cuenta mi hermano Carlos que un día cualquiera de la semana se encontraba a media tarde con mamá, disfrutando de un tinto, cuando una persona cruzó el corredor vía al baño entonando con voz ronca "Por aquí voy llegando señora Maria Rosa..."
La curiosidad fue grande, pues en esos días el pueblo se encontraba bastante solitario y eran muy pocas las personas que pasaban por la casa.

El señor, muy bien presentado, ya en el corredor se para y observa con detalle hacia el cementerio.

- Buenas tardes, se dirige a los contertulios, linda casa tienen uds.

-Gracias señor, responde mamá. Se toma un tinto, está recién hecho.

- Pues sabe que el aroma del café me antojó, le agradezco el cafecito, respondió el visitante visiblemente contento.

A estas alturas, Carlos se preguntaba en donde diablos había visto a esta persona cuando desde la puerta de la sala alguien entraba saludando alegremente. Era Manuel Rizo (Viejo amigo de Río de Oro, familia de músicos; abrazó a mamá y a mi hermano.

- ¿Qué... ya saben quién es el amigo que viene a conocer La Playa de Belén y los famosos Estoraques...? Es el Dr. Jorge Villamil, el músico y compositor.

- !Verdaaaad! Exclamó mamá,yo si decía...Yo como que lo conozco.

El tinto fue charladito con los visitantes; el Dr, Villamil estaba fascinado con el paisaje de la región y sobre todo de las mujeres...

Así, de esta manera, pasó por nuestra tierra el notable compositor.

De su extensa obra es mucho lo que hay por decir. Mi primera clase de música en la escuela fue con la canción "Espumas" y han sido innumerables las reuniones en las que las canciones del maestro animaban la velada. No creo que exista un Colombiano que no haya escuchado por lo menos una de sus canciones. Alvaro Claro Claro